Actividades para la atención a la diversidad

Somos niños justo hasta el momento en que queremos dejar de serlo. Y es una pena. Hay quien decide ser niño toda la vida y en ello radica su felicidad. Dentro del compendio de niños hay una parte que merece una atención especial. Ahora que pronto llegará el verano ellos como el resto de niños pueden y deben disfrutar de un buen día de piscina. Y lo más increíble de todo es que hay lugares donde de forma totalmente altruista se brinda precisamente eso, un día de actividades para la atención a la diversidad.

 

Apuesta por la diversidad y la inclusión

Son niños que necesitan atenciones especiales. Niños, o no tan niños, aunque serán niños de por vida, que en su nacimiento, niñez o desarrollo padecieron alguna discapacidad. Niños y no tan niños que al igual que al igual que al resto, les gusta disfrutar del verano, de la piscina, y de todo el beneficio que esta les proporciona.

 

Actividades para la atención a la discapacidad

Lejos de lo que pueda parecer, lo que a otra persona solamente le supone un baño o chapuzón, a nuestros protagonistas le supone un bien de valor incalculable. Para empezar, es evidente el beneficio físico. Piernas, brazos y corazón pueden ejercitarse a la perfección bajo el agua. Además, la resistencia que ejerce el agua ayuda al fortalecimiento de sus músculos.

El agua para ellos es atractiva. Todo lo que pueda hacerse en ella, o bajo ella, también ha de serlo. Así, gracias a la actividad dentro de una piscina, los niños con alguna discapacidad pueden mejorar su aparato psicomotor, aprendiendo dónde están sus límites y sintiéndose, por ende, más capaces para realizar la tarea.

El aspecto gravitatorio del agua es también importante a la hora de hacer terapia en el agua. Ayuda esta condición a mantener el equilibrio y a llevar a cabo movimientos que en otro entorno tal vez no sea capaz.

Mayor autoestima

Todo ello influye, irremediablemente en su autoestima. Gracias a las propiedades que un chapuzón les puede proporcionar pueden sentirse más fuertes y creer en sí mismos y en sus posibilidades. Esto mismo se traduce en felicidad. A ello se le une el componente de compañerismo y los lazos de unión que se crean en este tipo de terapias. Y todo redunda en una mayor capacidad de socialización.

Por increíble que parezca, y por mucho que haya evolucionado la sociedad, hoy día aún encuentran estos chicos barreras a su deseo. Barreras arquitectónicas, que tienen más fácil solución. Y barreras sociales. Para combatir estas últimas y construir un mundo más inclusivo hay acciones en algunos lugares que llaman al optimismo.

Inclusión en el Hotel Rural Finca La Herencia

Hablamos del Hotel Rural Finca La Herencia. Aquí, cada año, se organizan jornadas dedicas a ellos. Jornadas consistentes en actividades para la atención a la diversidad. Actividades que, a su vez, son totalmente gratuitas y en la que nuestros grandes protagonistas se lo pasan de lujo.

Se trata de unas jornadas que no se basan únicamente en el baño. Eso sería muy fácil y poco productivo. En estas jornadas que se les dedica a ellos, además de disfrutar de un entorno paradisiaco, llevan a cabo juegos y terapias que les reportan múltiples beneficios. Aquí juegan, se bañan y socializan, reciben, en definitiva, una educación inclusiva. Aquí, además del disfrute de un buen chapuzón se hacen juegos para que se diviertan, aprendan y sigan mejorando su día a día. Y además, también se les ofrece una merienda para calmar ese hambre que siempre da una buena jornada de baño.

Para el Hotel Rural Finca La Herencia de Guadalcanal esta acción es más que necesaria. Es un ejemplo que deberían tomar en otros lugares. Y es que con muy poco, con una simple acción como lo es la de abrir tu casa para el disfrute de un amigo, logramos incrementar la felicidad de personas que necesitan de acciones como estas.

 

Otras bondades

Aunque la piscina es la joya de la corona de estas jornadas, el Hotel Rural Finca La Herencia también brinda la oportunidad a sus ilustres invitados a que disfruten de los animales de la granja del establecimiento. Así pueden recolectar los huevos de las gallinas en libertad, o comprobar la docilidad del que dicen que es el mejor amigo del hombre, el perro. Ello por no hablar de nuestros pavos, conejos u ovejas. Y como no, burros, ponis y caballos adaptados a ellos. Tan beneficioso en las terapias, los equipos de esta Casa Rural Superior también están a su disposición.

Pioneros

El Hotel Rural Finca La Herencia nació precisamente con la idea de dar un servicio a estos niños que han permanecido tan olvidado durante años. Se creó concretamente en la cabeza de su dueño, Rafael Arcos, quien divisó tal paisaje y tan encomiable acción en el entorno idílico de Guadalcanal. Su personalidad y su trato con los niños, basado en la espontaneidad hacen el resto.

De la experiencia que brinda de forma totalmente gratuita el Hotel Rural Finca La Herencia ya han disfrutado centros como el de Aprosuba Llerena o Autismo Sevilla. Este año está previsto que lo haga la Asociación Asnadis de Constantina. El pasado año, a causa de la pandemia, no pudo organizarse, sin embargo, también se invitó a título particular a niños y niñas con discapacidad de la localidad a que disfrutaran de la piscina de agua salada del establecimiento, ante la imposibilidad de hacerlo en la Piscina Municipal, debido a su cierre a causa del COVID-19. Este año, siempre que la situación lo permita, volverán de nuevo a disfrutar de la piscina y de todas las actividades para la atención a la diversidad.